Casi 36 horas después de haber sido secuestrada, la señora Maximina Ruiz López, de 86 años, pudo reunirse anoche con sus familiares, quienes la esperaban ansiosos en la unidad policial de Sébaco, Matagalpa.
Ella fue liberada este martes en el sector de Salale, a 12 kilómetros de El Sauce, departamento de León, “ante la presión” ejercida por un operativo conjunto entre el Ejército de Nicaragua y la Policía Nacional, refirieron anoche mandos militares y policiales, en una conferencia de prensa en Sébaco.
“Estoy satisfecha, muchas gracias a todos los amigos, estoy sana y salva (…) agradecida sobre todo con Dios y después con la Policía”, refirió en breves declaraciones la señora Ruiz, al arribar a la unidad policial de Sébaco, donde familiares y amigos agradecieron a Dios por la liberación de Maximina.
Hasta ahora la Policía no tiene pistas sobre los secuestradores, reconoció el comisionado mayor Ramón Calderón, jefe departamental de la Policía en Matagalpa, indicando que “seguimos trabajando” y “tenemos equipos en el terreno”.
Ruiz y su esposo Francisco Moreno Tórrez, de 93 años, fueron secuestrados a las 7:20 a.m. del lunes, cuando iban llegando a la finca que poseen en el kilómetro 110 de la Carretera Panamericana, entre Sébaco y San Isidro.
Los ancianos iban acompañados por su hijo Danilo Moreno Ruiz, quien conducía una camioneta con placas ES 09512 al momento en que tres hombres los encañonaron con fusiles AK.
Moreno Ruiz relató anoche que los hombres lo ataron con cinta adhesiva y lo metieron a un dormitorio de la finca, cerca de donde previamente habían encerrado a varios trabajadores. Luego se llevaron a los ancianos sobre la ruta a León.
“Ellos sabían a qué hora íbamos a llegar, nos estaban esperando”, relató Moreno Ruiz.
En tanto Moreno Tórrez fue liberado más tarde en el sector de Las Mangas, en la carretera San Isidro-León, pero los maleantes se llevaron a la señora Ruiz, manteniendo en zozobra a los familiares, quienes nunca tuvieron contacto con los secuestradores.
Una fuente militar reveló que los secuestradores abandonaron a la anciana en Salale y un transportista la vio en la carretera y la llevó hacia El Sauce.
Mientras tanto, Moreno Tórrez dice que uno de los secuestradores lo mantuvo encañonado con un revólver y “nos llevaron en mi camioneta a meternos a otra camioneta como a un kilómetro y medio de Las Mangas”.
“Dios y la Policía han hecho este trabajo, ustedes no tienen idea de cuánta gente de Estelí me decía: ‘estamos orando por ustedes’ (…). Fueron 36 horas duras, con desvelo, hambre y miedo de que la fueran a matar, así es que fue un trabajo gigantesco y el pueblo de Nicaragua tiene que reconocer que la Policía sí protege”, dijo Moreno Tórrez.
Don “Chico” Moreno, como le conocen popularmente en Estelí, es muy apreciado porque lo recuerdan como el alcalde que durante su período de 1972 a 1977 contribuyó mucho al progreso, llevando entre otras cosas, la energía a la ciudad.
